miércoles, 28 de abril de 2010

The Grifters (Los timadores)

MODERNOS CLÁSICOS
The Grifters
Dirección: Stephen Frears
Año: 1990

Edipo en Los Angeles

Con una estrofa sobreimpresa de la canción popular The Lady is a Tramp, comienza este film que tantas veces he revisitado y que con los años se ha convertido en un referente imprescindible para mí. La cita escogida habla de pillaje, de timo, de alguien que recorre los lugares con estas malas artes, y a continuación, al ritmo de los compases de una espléndida partitura compuesta para la ocasión por el gran Elmer Bernstein, entran los títulos de crédito un suerte de postales con aspecto retro de distintas ciudades. Ámbito donde se mueve esta especie humana que son los estafadores, farsantes y demás facinerosos.

Jim Thompson, autor del libro en el que se basa esta película, conocía perfectamente este submundo. Su propia vida daría para varias novelas. Digamos solo que este escritor, imprescindible de la narrativa noir americana, tuvo un contacto cercano y directo con las cloacas de la sociedad y del alma que tan bien ha sabido recrear en su prolífica obra. Pero sus personajes son complejos y trágicos. Sus vidas, trayectorias al margen de la ley teñidas de violencia donde, citando al propio Thompson, “las cosas no son lo que parecen”.

Y eso es lo primero que vemos en la película, una magnífica pantalla dividida en tres que nos presenta a los personajes impecablemente arreglados y dispuestos a dirigirse a sus empleos. Pero pronto descubriremos que no son más que maestros del engaño, un oficio aprendido a golpes. La primera es Lily Dillon, interpretada por Anjelica Huston en el que sin duda es el papel de su vida, niveladora de apuestas hípicas a la órdenes del mafioso Bobo Justus (Pat Hingle) al que sisa dinero que esconde en el maletero de su coche. Su hijo Roy Dillon (John Cusack) es un timador de baja calaña, por consejo de su mentor, de apariencia intachable, lo que le permite acercarse a desplumar a sus víctimas con mayor facilidad. Myra Langtry, es la tercera en discordia, interpretada por una joven Annette Bening, novia de Roy y estafadora que no duda en utilizar su sexualidad como arma para conseguir sus fines y que siente nostalgia de tiempos en los que se dedicaba al timo de altos vuelos.

Pero la cosas se tuercen práctimente desde el principio. A Roy le asestan un golpe fuerte en el estómago consecuencia de un timo fallido, al tiempo que recibe la visita de Lily a la que no veía desde hacía 8 años. Su llegada le salva la vida y a partir de ese momento su madre parece querer recuperar su afecto perdido en dura pugna con su actual novia. Roy se resiste a las intrusiones de Lily en su vida, por el abandono que sufrió siendo niño y cierto complejo de Edipo, tema recurrente en las novelas de Jim Thompson. La tensión sexual entre ambos personajes desde la primera escena es más que evidente. Así ambas mujeres compiten por el cariño de Roy que se debate entre los planes de Myra y una irremediable atracción por su propia madre. Chicas malas y peligrosas como un revólver cargado. Y es que para un hombre manejable hay algo peor que una mujer fatal: dos. Ellas reinan en la película con personajes implacables, con una escala de valores muy personal e indisociable de lo que son y lo que representan.

Frears consigue con esta cinta momentos de alto nivel. De cine negro en estado puro. Todos los detalles: la iluminación sombría, las dobles identidades, los diálogos brillantes, la violencia contenida que estalla en determinados momentos nos remite al cine que hicieron en los años 40 gente como Fritz Lang, John Huston (padre de la protagonista) o mi estimado Howard Hawks. En esta su segunda película americana (la primera fue Las amistades peligrosas) producida por Martin Scorsese, el director apostó por un género entonces en desuso y a muchas personas de mi generación nos excitó la curiosidad hacia ese tipo de cine que ha dado personajes y tramas inolvidables para la memoria colectiva. Para la mía queda ese momento final de Lily Dillon (Anjelica Huston) en el ascensor y su personal descenso a los infiernos.

martes, 27 de abril de 2010

HBO - Últimos estrenos


FICCIÓN (y NO FICCIÓN) PARA TELEVISIÓN

El 31 de mayo termina el plazo para presentar los programas de televisión que competirán por los Emmy de este año, y las cadenas apuran hasta el último momento para estrenar sus "platos fuertes". Como las series necesitan un recorrido de capítulos para llamar la atención de los académicos, las últimas semanas es el turno de las películas para televisión que desde hace un tiempo y gracias a cadenas como HBO, con la complicidad de reconocidos actores y directores de cine, han subido el nivel ofreciendo films que nada tienen que envidiar a los que podemos ver en las carteleras. Es más, superan en calidad a la mayoría con creces.

Con magnificas críticas, ha estrenado HBO You don't know Jack, dirigida por Barry Levinson que entre otros tiempos ganó el Oscar por Rain Man, protagonizada por Al Pacino, Susan Sarandon, Danny Huston y John Goodman (que últimamente también podemos verlo en Treme de la misma cadena). La cinta habla de los avatares del conocido Doctor Muerte, Jack Kervorkian, médico estadounidense que aplicó la eutanasia a 130 pacientes incurables bajo el lema "morir no es un crimen". Kervokian, interpretado aquí con convicción por Pacino, tuvo múltiples problemas con las autoridades que lo llevaron a juicio por homicidio en primer grado El Doctor Muerte renunció a asesoramiento legal y decidió representarse a sí mismo. De esto trata la tv-movie que hará las delicias de los fans de Al Pacino con un personaje iluminado con problemas evidentes de salud, lo que implica una composición física extrema, y acosado por la ley. Su labor huele a premio Emmy por los cuatro costados.

Casi a punto de concluir el plazo, el 29 de mayo, HBO estrenará The Special Relationship, tercera entrega de la Trilogía de Blair (que no tiene nada que ver con la bruja sino con el presidente Tony Blair) del autor Peter Morgan (Frost/Nixon). Las dos primeras, The Deal (película para televisión) y The Queen, fueron dirigidas por Stephen Frears. Ésta nueva aproximación corre a cargo de Richard Loncraine también director de cine (Ricardo III). Todas tienen en común que el personaje de Tony Blair es interpretado por el actor Michael Sheen, y en esta ocasión cuenta la relaciones, a veces complicadas, entre el Primer Ministro del Reino Unido y el Presidente norteamericano Bill Clinton, al que da vida un maduro Dennis Quaid.

Y es que esta cadena es una fuente inagotable de buena televisión. Otra muestra de ello es el documental en nueve partes llamado genéricamente Masterclass, donde personalidades ilustres (Edward Albee, Placido Domingo, Julian Schnabel o Liv Ullman) imparten conocimientos y experiencias a un grupo de afortunados, los alumnos seleccionados por la National Foundation for Advancement in the Arts' YoungArts Program. Todo un lujo poder recibir una clase de esa inolvidable actriz de Ingmar Bergman y espléndida directora llamada Liv Ullman.

lunes, 26 de abril de 2010

El Escritor



ESTRENOS
The Ghost Writer
Dirección: Roman Polanski
Año: 2010

El “negro” del Primer Ministro

Siempre es una buena noticia que Roman Polanski se ponga tras las cámaras. Ha tocado casi todos los géneros pero con la peculiaridad de que en cada película deja su impronta personal, sea el cine de terror, la comedia o el drama. Polanski tiene un universo propio con personajes característicos. Sus protagonistas son casi siempre antihéroes que se ven forzados por las circunstancias a demostrar su valentía y a afrontar los hechos fatídicos que les sobrevienen. El Escritor no es una excepción en este sentido.

Un biógrafo incipiente (Ewan McGregor), con pequeños éxitos de ventas, es contratado como “negro” por el Primer Ministro de Reino Unido, Edward Lang (Pierce Brosnan), para revisar sus memorias y darles “forma”. Todo esto tras el suicidio del anterior escritor elegido en extrañas circunstancias. Al poco tiempo del encargo, surge la noticia de la presunta responsabilidad de Lang en las torturas a presos inocentes relacionados con la guerra de Irak.

Con este planteamiento Polanski elabora un thriller político (género que todavía no había tocado), en la línea de El informe pelícano (1993) o Todos los hombres del presidente (1976), ambas de Alan J. Pakula, pero con un estilo clásico que lo acerca más al cine noir de Howard Hawks que a referentes más cercanos. Una exquisita puesta en escena llena de claroscuros, una planificación milimétrica y un desarrollo narrativo in crescendo que sólo está al alcance de unos pocos. Un ejemplo de su maestría es ese apoteósico final, que obviamente no voy a desvelar, que Polanski ofrece fuera de campo.

Y es que aquí, como en el cine que escribió William Faulker para Hawks, también hay una mujer fatal de altura, la primera dama interpretada por una soberbia Olivia Williams, a la que pudimos ver hace poco en An Education. Cuando ella está en escena la película sube enteros, desde la primera aparición hasta la última. Aunque cabe destacar también la presencia de un puñado de secundarios de lujo: desde un irreconocible James Belushi hasta la breve pero genial aparición del veterano Eli Wallach (¡tiene 94 años!), además de los siempre solventes Tom Wilkinson y Timothy Hutton.

El argumento, basado en la novela The Ghost de Robert Harris, ofrece paralelismos con la historia reciente. No es difícil ver a Tony Blair en ese Edward Lang, y en la trama una manera de explicar desde la ficción el apoyo incondicional de Gran Bretaña en la invasión a Irak. Es como mínimo curioso que cuando estaba a punto de estrenar esta película con alto contenido político, los servicios americanos lo detienen en el aeropuerto Zurich y lo convierten en un “Napoleón en Santa Elena”, frase que se cita en la película como una premonición.

Póster - Fish Tank

¡Buenas noticias! Fish Tank se estrena en nuestro país el próximo viernes 30 de abril. Aquí os dejo el fabuloso cartel que ha diseñado Jeremy Saunders.

domingo, 25 de abril de 2010

Michael Fassbender


PERFILES
Michael Fassbender

Edad: 33 años.
Origen: Nació en Alemania pero creció en Irlanda. Su padre es germano y su madre norirlandesa. Habla perfectamente inglés y alemán, razón por la cual Quentin Tarantino contó con él para el personaje del teniente Archie Hicox de Malditos bastardos (2009).
Sus comienzos: La mini-serie Band of Brothers (2001) producida por Tom Hanks y Steven Spielberg.
La gran oportunidad: Hunger (2008), debut del director y artista Steve McQueen, donde interpreta al preso del IRA Bobby Sands que se sometió a una conocida huelga de hambre de funestas consecuencias. Fassbender llegó a pesar 59 kilos al final del rodaje.
La confirmación: Malditos bastardos (2009) de Quentin Tarantino, en un papel no muy extenso pero de vital importancia en la película.
Taquillazo: 300 (2006) de Zack Snyder, aunque no era precisamente el protagonista y se le reconoce poco.
Reconocimientos: Por Hunger (protagonista) y Fish Tank (secundario) ha recibido múltiples premios de Festivales y Asociaciones de Críticos de Cine.
Quizá no sepas: Que participó en el video-clip de The Cooper Temple Cause Blind Pilots donde sufría una extraña transformación.




Pendiente de estreno: Centurion (2010) de Neil Marshall, en la que interpreta a un soldado romano, pero esta vez ya como cabeza de cartel y la adaptación de cómic Jonah Hex (2010) con Josh Brolin y Megan Fox. Todas películas para el gran público que tiene que conocerlo todavía.



Proyectos: Muchos y variados; la nueva adaptación de Jane Eyre, un thriller con Forest Whitaker y los nuevos trabajos de Steven Soderbergh y David Cronenberg.

Sus mayores logros:

Patinazos: No le ha dado tiempo aún. Esperemos que no los tenga.
A favor: Es muy camaleónico.
En contra: Todavía no es muy conocido.

sábado, 24 de abril de 2010

Fish Tank



ESTRENOS
Fish Tank
Dirección: Andrea Arnold
Año: 2009



Difícil adolescencia

Una de las sorpresas de la pasada temporada, Fish Tank de la directora inglesa Andrea Arnold, todavía sigue inédita en nuestro país. Sorpresa relativa, porque esta realizadora ya apuntaba maneras en su primer largo Red Road, que sucede también en el paisaje urbano donde ella suele ambientar sus historias no exentas de cierto aire de desolación. Si allí era la ciudad de Glasgow, aquí es Essex y los suburbios.

La protagonista es una adolescente conflictiva, Mia (Katie Jarvis) en constante guerra con el mundo que la rodea: el colegio, sus amigos y su madre. Esta última está más preocupada en la busca y captura de un novio que en atender a la educación de Mia y su hermana pequeña. Un hogar monoparental y en este caso desestructurado. Así la joven campa a sus anchas hasta el día que los servicios sociales la lleven a un Centro con el consentimiento de su tutora legal. Pero la muchacha tiene sueños: será bailarina de hip hop famosa y saldrá en la tele. Esos valores triviales que los adultos estamos metiendo en la cabeza de los pequeños y que los convierten en juguetes rotos antes de salir de fábrica.

Sin guía ni afecto la protagonista elabora su propio código de conducta con el que manejarse en esta existencia sin rumbo. Pero un día la díscola progenitora introduce en sus vidas a Connor (Michael Fassbender) alguien que se interesa por sus deseos, inquietudes y necesidades y trastoca su pequeña existencia. La adolescente se enamora sin poder remediarlo del novio de su madre, probablemente la única persona que la ha escuchado en toda su vida y que parece creer en sus capacidades. Pero en ese difícil periodo que es la adolescencia, en ese tránsito que esta a punto de ocurrir, su atracción por esta figura paterna es inevitable y hasta consecuente.

Es muy meritoria la dirección de Arnold, la forma en que retrata a la figura masculina bajo la mirada de una adolescente en pleno despertar sexual. La fascinación que produce un adulto afectuoso para alguien desatendido que en realidad todavía es una niña, aunque con hormonas ya en plena revolución. Connor es para Mia una tabla de salvamento entre tanta apatía y desarraigo.

Todo en la película está retratado de forma creíble y honesta. Libre de ornamentos y florituras innecesarias. Y a ello contribuye, sin duda, una pareja protagonista a la altura de las circunstancias: Katie Jarvis, joven prodigiosa capaz de ofrecernos matices y permitir que entendamos a su personaje incluso cuando sus actos la contradicen, y, sobre todo, Michael Fassbender como el objeto del deseo. Por una vez, los papeles se invierten y Lolita desea al profesor Humbert. Claro que el escenario y los hechos son algo distintos.

Estimable cinta no exenta de denuncia social sin adoctrinamientos ni moralismos, con un final entre amargo y esperanzador, porque así son las cosas en este que llamamos primer mundo y que, a veces, no lo es tanto.

viernes, 23 de abril de 2010

MGMT


DISCOS RECOMENDADOS
MGMT
Disco: Congratulations

Por fin la espera ha terminado, ya está entre nosotros el nuevo trabajo de Andrew VanWyngarden y Ben Goldwasser, Congratulations. Su primer disco como MGMT Oracular Spectacular (el verdadero álbum debut Climbing to the Loss lo firmaron como The Management cuyas siglas son MGMT) había puesto el listón muy alto: muy buenas críticas y una gran acogida de público. Y tengo que decir que tanta expectación ha valido la pena porque Congratulations no decepciona en absoluto. Depura todo lo oído en su antecesor hacia un sonido muy personal, su pop psicodélico con enormes influencias de la música hippie californiana de los 70. Todo acompañado de un concepto algo particular de la electrónica que evita que estemos ante un disco retro, aunque en algunos momentos te invada una sensación de déjà vu.

Temas instrumentales y canciones como la delicada Congratulations o ese corte de 12 minutos indescriptibles, con continuos cambios en la estructura musical, llamado Siberian Breaks y por supuesto Flash Delirium, primer single y carta de presentación que nos introduce en su universo paralelo de psicodelia infinita. Para ello, nada mejor que un video-clip de lo más desconcertante; casi todos los de MGMT me lo parecen, es parte de su encanto. La única pega: 9 temas son pocos después de tanta dilación. Pero ya saben, más vale poco y auténtico que mucho relleno.

Póster - I am Love

Belleza y sofisticación para los carteles de I am Love (Io sono l'amore) creados por el diseñador gráfico Sam Ashby. La película ya tiene fecha de estreno en nuestro país: ¡el próximo 28 de mayo!

jueves, 22 de abril de 2010

Las amistades peligrosas


DIÁLOGOS DE CINE
Dangerous Liaisons
Dirección: Stephen Frears
Año: 1988
Guión: Christopher Hampton
Actores: Glenn Close (Marquesa de Merteuil) y John Malkovich (Vizconde de Valmont)

VALMONT: A veces me pregunto cómo habéis conseguido inventaros a vos misma.

MERTEUIL: No he tenido otra opción; soy mujer. Y las mujeres estamos obligadas a ser más sabias que los hombres. Podéis destrozar nuestra reputación y nuestra vida con sólo unas cuantas palabras bien elegidas. Por eso he tenido que inventarme no sólo a mí misma, sino formas de escapar que nadie había imaginado. Y si lo he conseguido, es porque siempre he sabido que había nacido para dominar a vuestro sexo y vengar el mío.

VALMONT: Sí; pero yo os he preguntado cómo.

MERTEUIL: Cuando me presentaron en sociedad, tenía quince años. Y ya sabía qué papel estaba condenada a representar, el de guardar silencio y obedecer, lo que me dio la oportunidad perfecta para escuchar y observar: escuchar no lo que me decía la gente, que naturalmente carecía de interés, sino precisamente aquello que querían ocultar. Practiqué la indiferencia. Y aprendí a sonreír mientras bajo la mesa me clavaba un tenedor en el dorso de la mano. Me convertí en una virtuosa del engaño. Y no buscaba el placer, sino el conocimiento. Consulté a los más estrictos moralistas para dominar las apariencias, a filósofos para saber que pensar y a novelistas para saber hasta dónde podía llegar. Y al final lo destilé todo en un principio asombrosamente simple: vencer o morir.


miércoles, 21 de abril de 2010

Luz de Agosto


LA COLECCIÓN
Luz de Agosto
Autor: William Faulkner
Título original: Light in August
Año de publicación: 1932

En un lugar del sur profundo

Durante años he ido acumulando una colección de libros, novelas en realidad, que me gustaría poder leer algún día. De los más clásicos a los más actuales, aunque soy poco dado a comprar novedades sino son de autores que ya conozco, por una u otra razón, o me vienen recomendados por mi amigo V.R., lector de gusto incuestionable y como yo coleccionista nato, aunque selecto, y cinéfilo empedernido.
Para inaugurar este apartado, he escogido el que para mí es el autor más cinematográfico de todos: William Faulkner. No sólo por sus incursiones en el cine, que para los que no lo sepan fue el coautor del guión de Tener y no tener (To Have or not to Have, 1944) y El sueño eterno (The Big Sleep, 1946), dos obras maestras de Howard Hawks protagonizadas por Humphrey Bogart y Lauren Bacall, sino por su estilo narrativo profundamente visual, resultado de unas descripciones minuciosas de los personajes y las situaciones en las que se ven inmersos, con especial habilidad para relatar escenas de acción y lucha de forma exhaustiva. Supongo que esto debió atraer el interés del Hollywood de la época. Aunque en realidad, no muchas de sus novelas se han adaptado al cine. El ruido y la furia (The Sound and the Fury, 1959) protagonizada por Yul Brynner y poco más. Sus narraciones cortas han tenido más suerte. De hecho, la película El largo y cálido verano (The Long, Hot Summer, 1958) se compone de tres relatos del autor.

Este escritor, nacido en New Albany, sudista y alcohólico reconocido fue muy rompedor en la narrativa de la época al introducir el monólogo interior de los personajes y los saltos en el tiempo de la historia. Creó un condado ficticio: Yoknapatawpha, basado en Lafayette County en Mississippi. Incluso elaboró un mapa para llegar hasta él. Y ambientó en ese agreste lugar muchos de sus relatos. Es el caso de su novela Luz de agosto que he releído una y otra vez fascinado por sus personajes y su estructura dramática.

La obra nos adentra en el sur profundo norteamericano, un mundo en el que predomina la oscuridad y la violencia. Y frente a esto una luz, el personaje de Lena Groove, una embarazada que busca al hombre que la dejó en ese estado, ingenua y sumisa a su destino. Ella es una de los hilos conductores de esta epopeya. El otro, Joe Christmas, un mestizo de sangre negra que huye de una jauría humana que pretende ajusticiarlo por el asesinato de una mujer blanca.

Este último es como un suicida que se abalanza sobre su destino cruel con la necesidad de expiar los pecados de sus ancestros. Lena, sin embargo, acepta dócil su suerte y sale victoriosa. Una inocencia que puede sobrevivir a todo el horror que la rodea. Dos formas distintas de sumisión, que es el verdadero tema de este relato, que también habla de xenofobia y de las viejas heridas de sur americano, en la figura del reverendo Gail Hightower y sus visiones sobre la guerra civil, otra de las voces de la novela.


No crean que las obras de Faulker son localistas, por ambientarse en parajes inhóspitos de su tierra. Los personajes, sus motivaciones y dramas personales son universales. Eso es lo que hace de este escritor un autor fundamental en esto de la ficción que tanto me gusta. Acercaros a él con tranquilidad; su prosa es recargada pero rica y placentera. Si todavía no habéis leído nada de este gran novelista, Luz de Agosto es un buen comienzo.

Erykah Badu


DISCOS RECOMENDADOS
Erykah Badu
Disco: New Amerykah Part Two. Return of the Ankh

Disco y video con polémica

El regreso de la reina del Neo Soul ha venido acompañado por la polémica. Un video-clip en el que se desnuda por las calles de Dallas ante la mirada atónita de los transeúntes. Rodado en estilo "guerrilla" y en una sola toma, este trabajo ha despertado mucha controversia entre los sectores más puritanos de la sociedad americana. Y es que, además, la Badu en un momento del video parece caer fulminada por una bala justo en el lugar donde asesinaron a John Fitzgerald Kennedy en 1963. La canción Window Seat habla de despojarse del pasado, de los traumas y, desde luego, la muerte a tiros del presidente JFK lo fue para una parte de la sociedad estadounidense. Coherencia ideológica u oportunismo promocional: esa es la duda de muchos. Lo cierto es que mezclar desnudos, aunque sean pixelados, y sitios sagrados siempre hacen saltar las chispas de los más conservadores.

Es una polémica desproporcionada. Erykah Badu además de cantante es actriz, la pudimos ver en Las Normas de la Casa de la Sidra (1999), y lo que hace no es más que una performance, género que de por sí ya tiene una naturaleza reivindicativa, inspirada en el video-clip, como ellos mismos reconocen al principio, Lessons learned del grupo punk Matt and Kim. Lo peor que puede ocurrir es que este escándalo oscurezca la justa valoración de lo que es, en mi opinión, un gran disco: New Amerykah Part Two. Return of the Ankh. Quizá le sobre algún interlude a lo Janet Jackson, pero por lo demás es una producción impecable de una voz cada día más personal y mejor influida.

lunes, 19 de abril de 2010

Balas sobre Broadway


DIÁLOGOS DE CINE
Bullets over Broadway
Dirección: Woody Allen
Año: 1994
Guión: Woody Allen y Douglas McGrath
Actores: Dianne Wiest (Helen Sinclair) y Harvey Fierstein (Sid)

Helen entra en el comedor. La cámara la sigue.

SID (off): Julian dice que los proyectos fracasaron por culpa de los directores.

HELEN: ¡Oh, Julian! ¡Julian Marx! Yo hago obras montadas por Belasco o Sam Harris. No por un vendedor de pantalones judío convertido en productor.

Helen se detine junto a la mesa, abre una cajita, la cierra y se dirige hacia una mesa mayor al tiempo que Sid entra en escena.

HELEN: Mi ex marido siempre decía: "Si tienes que hundirte, húndete con el mejor".

SID: ¿Qué ex marido?

HELEN: No sé cuál de ellos. El del bigote.



Para los que prefieran la versión original pulsar aquí.

domingo, 18 de abril de 2010

Helena Bonham Carter


PERFILES
Helena Bonham Carter

Edad: 43 años.
Sus comienzos: A Pattern of Roses (1983), una tv movie de la que hay muy pocas referencias.
La gran oportunidad: Su siguiente trabajo, Una habitación con vistas (1985) de James Ivory, ya en un papel protagonista. La película fue un éxito inesperado.

La confirmación: Regreso a Howards End (1992), cuarta adaptación de una novela de E.M. Forster en la que aparecía. Una suerte y una condena. La encasilló en papeles de corsé y miriñaque. Etiqueta que ella detesta y que ha luchado por quitarse.
Taquillazo: Alicia en el país de las marravillas.
Padrinos: Al principio el equipo Merchant-Ivory con sus adaptaciones de Forster y ahora su compañero sentimental, el director Tim Burton, con el que ha hecho 6 películas.
Parecidos razonables: es una mezcla entre Susan Hayward y la gran Anne Bancroft.

Nominaciones a los Oscars: La alas de la paloma (protagonista) en 1998.
Nominaciones interrumpidas: en mi opinión, Regreso a Howards End (secundaria), El museo de Margaret (protagonista) y El club de la Lucha (secundaria).
Oscars: Ninguno, todavía.
Otros reconocimientos: Algunas nominaciones a los Globos de Oro y a los Emmy (TV), pero nada destacable. Los premios rehuyen un poco a Helena.
Salario: A fecha de hoy lo desconozco.
Papeles para los que fue considerada: rechazó el papel de Rompiendo la olas (1996) por su alto contenido sexual. Lars von Trier la quería a ella para este personaje pero tuvo que conformarse con una desconocida Emily Watson que fue nominada por este trabajo a los Oscar de 1997 y obtuvo multitud de reconocimientos.
Es muy amiga de: Que se sepa, su colega Johnny Depp.
Quizá no recuerdes: Que fue la novia de Frankenstein en la versión que dirigió Kenneth Branagh, su pareja en aquel entonces y hasta 1999, y la mujer de Woody Allen en Poderosa Afrodita (1995).
Pendiente de estreno: Las dos últimas partes de Harry Potter, una de ellas se estrena este año, y su vuelta al cine de época en The King's Speech junto a Colin Firth.
Proyectos: De momento se desconocen, pero Tim Burton está pensando en adaptar La familia Addams.
Actividades paralelas: Vida familiar. Tiene dos hijos con Burton.

3-3

sus tres picos más altos (en mi modesta opinión):


sus tres resbalones (porque nadie es perfecto):

A favor: Ha conseguido ser muy versátil y escapar del encasillamiento de "actriz de época".
En contra: Necesita ya un personaje con más peso dramático. Tanto Harry Potter y colaboraciones desafortunadas con su pareja están haciendo mella en su carrera.

viernes, 16 de abril de 2010

Alicia en el país de las maravillas



ESTRENOS
Alice in Wonderland
Dirección: Tim Burton
Año: 2010

Detrás del espejo no hay nada

Uno de los mayores placeres que me ofrece este blog es poder escribir, dejar constancia, de aquellas propuestas relacionadas con la ficción que me seducen, provocan o conmueven. Aunque a veces aquello o aquellos que te gustan parecen haberse perdido en el camino de baldosas amarillas. Ese es el caso de Tim Burton, director de cine responsable de obras memorables (Pesadilla antes de Navidad, Eduardo Manostijeras, Ed Wood...) y de eso que ha venido en llamarse "universo burtoniano", que viene a ser un estilo visual gótico apto para todos los públicos. Ese es su sello de identidad, incluso una garantía para el espectador que se acerca curioso a su cine.
Da la sensación que aunque le encargarán el remake de Mujercitas o Siete Novias para Siete Hermanos sabría llevarlas a su terreno. Y ese es un poco el problema en cuestión: que da lo mismo lo que se traiga entre manos, lo importante es la puesta en escena "burtoniana". Así lo ha entendido Hollywood que no escatima en presupuesto para que despliegue su imaginería visual, apabullante por otro lado, pero últimamente algo carente de contenido y significado.

Los libros de Lewis Carroll, Las aventuras de Alicia en el país de las maravillas y sus secuelas, nunca han estado entre mis libros de cabecera ni cuando era niño. Su mundo surrealista y simbólico me resulta simpático y poco más. Siempre he sido más del Pinocho de Carlo Collodi, obra que de forma indirecta llevó a la pantalla Burton con Eduardo Manostijeras de forma mucho más afortunada que en esta ocasión. Pero vayamos por partes.

Los escritos del británico, también matemático y sacerdote, eran una crítica al sistema educativo de la época victoriana. Así los buenos modales de la niña Alicia contrastaban con el anárquico y alocado mundo de fantasía. Aquí de entrada deciden cambiar la edad de la protagonista, con la intención evidente de atraer a un público más adulto, sin una justificación demasiado convincente. Casi todos los cambios al material original parecen más bien impuestos por criterios absolutamente comerciales.

Como si de una novela de Jane Austen o Edith Wharton se tratara, asistimos en la primera parte a las peripecias de una joven indómita en un mundo de tradiciones que la obligan a seguir las reglas establecidas. De esa forma, justifican la necesidad de escapatoria de la heroína, ya adulta, a un universo sin normas. Hasta ahí todo viable. Pero ese “país de las maravillas” es el mismo de la Alicia del libro, un poco infantil para alguien ya talludito con otro tipo de problemáticas. Recientemente una película de Henry Selick (curiosamente codirector de Pesadilla antes de Navidad) Los mundos de Coraline recogía mejor el espíritu de la obra de Carroll, pero claro allí era una niña la que huía de las pautas marcadas por los adultos. Si es uno de ellos se me antoja más un problema de personalidad.

Vaciada de simbolismos e interpretaciones complejas, porque así resulta más asequible a todos los públicos, sólo nos queda ir descubriendo las distintas criaturas que ha diseñado para el evento o reconocer debajo del maquillaje a los famosos actores que deambulan por el metraje disfrazados de personajes sin saber muy bien que hacer con ellos (lamentable lo de Anne Hathaway por no hablar de sus cómplices habituales Helena Bonham-Carter y Johnny Depp).

Todo vale para llegar hasta el inevitable enfrentamiento final entre el bien y el mal, marca de fábrica de la empresa que produce, con monstruos digitales y batallas (no recuerdo que las hubiera en ninguno de los libros) con las que poder elaborar el videojuego que venderán de forma paralela. Si a esto unimos un precipitado desenlace nada propio de un narrador como Burton, el resultado es la más absoluta de las decepciones.

Y es algo paradójico, porque este reino tan disfuncional y estrambótico hacia de Tim Burton la elección potencial más apropiada. Nada más lejos de la realidad. El mundo personal de este director no está protagonizado por jóvenes rubias con dudas de casorio sino individuos estrafalarios, monstruos de apariencia y excluidos de la más diversa clase. Ahí es dónde Burton despliega su talento y crea universos “maravillosos” que conectan con cualquier espectador que tenga un mínimo de sensibilidad hacia la diferencia. Por eso, quizá, ha engrandecido el protagonismo del sombrerero (Johnny Depp).

Aunque aquí, por desgracia, se limita a hacer lo que la productora Disney, que ha puesto el dinero, espera de él. Un objeto hueco envuelto en precioso celofán, que después ellos pasarán a 3D para sacarle el máximo rendimiento en taquilla, porque es lo que ahora se lleva.

El espíritu de Ed Wood Jr. (el cineasta) se le debería aparecer al señor Burton como el fantasma del pasado de Cuento de Navidad y mostrarle a su antiguo yo, a su amor por el cine más bizarro, por figuras como el propio Wood o Vicent Price (a quien el mismo homenajeó repetidas veces). Así al volver al presente descubriría que ha triunfado en el sentido en el que se triunfa hoy día: ganando mucho dinero. Pero que seguramente ahora, como una Alicia adulta que ha perdido su inocencia, cuando mira detrás del espejo no ve absolutamente nada.